En México, a pesar de tener una fuerte tradición relacionada con las festividades patrias y el Grito de Independencia, no se cuenta con un documento oficial que defina el ceremonial específico a seguir. A pesar de esto, la costumbre, la tradición y las particularidades de cada región han creado una especie de “guion no oficial” que se sigue cada año en los 2,469 municipios de las 32 entidades federativas y por el propio presidente de la República. Este “guion”, aunque no esté legislado, se ha establecido a lo largo de los años como una fórmula habitual que combina el respeto a los símbolos patrios, la historia y la solemnidad de la ocasión y hasta el estilo de la autoridad en turno.
Pero antes de hablar de la práctica, veamos algunos elementos que son fundamentales en esta ceremonia.
Presencia y uso de la Bandera Nacional
La Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales establece las reglas que regulan el uso y tratamiento de los símbolos patrios. Entre los artículos relevantes se destacan:
- Artículo 1: El Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales son los símbolos patrios de los Estados Unidos Mexicanos, y esta ley regula su empleo y difusión.
- Artículo 9: En ceremonias oficiales donde esté presente la Bandera Nacional, se deben rendir los honores correspondientes, que incluyen el saludo civil simultáneo.
- Artículo 12: Los honores a la Bandera deben preceder a cualquier tributo rendido a personas, lo que subraya la importancia de estos símbolos como representación del Estado.
- Artículo 18: En fechas patrias como el 15 y 16 de septiembre, la Bandera debe izarse en los edificios gubernamentales y lugares públicos. Estas fechas conmemoran el inicio del movimiento de independencia, liderado por el cura Miguel Hidalgo en 1810.
El uso correcto de la Bandera es esencial para dar solemnidad a la ceremonia del Grito de Independencia, destacando la relevancia del respeto a los símbolos patrios en todos los actos oficiales.
BONUS Normativa sobre los Símbolos Estatales
A pesar de que no hay una normativa federal para banderas estatales, cada estado puede regular su propio escudo y sus símbolos locales a través de leyes estatales. Sin embargo, estas leyes están subordinadas a la normativa federal, que garantiza el respeto y la preeminencia de los símbolos patrios nacionales.
Es aconsejable investigar la normativa de cada estado y así evitar errores en el uso conjunto de símbolos patrios y los estatales. Para ejemplo, la Ley del Escudo, la Bandera y el Himno del Estado de Guanajuato https://congreso-gto.s3.amazonaws.com/uploads/reforma/pdf/3529/LEBHEG_NVA_24Nov2023.pdf
La Banda Presidencial
Uno de los aspectos más emblemáticos de la ceremonia es la presencia de la Banda Presidencial, símbolo exclusivo del Presidente de la República. Según la legislación vigente, en particular el Artículo 34 de la Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales, la Banda es un distintivo del Poder Ejecutivo y su uso está estrictamente limitado al presidente, quien debe portarla en actos de gran solemnidad, como la conmemoración del Grito de Independencia la noche del 15 de septiembre. La Banda lleva los colores de la Bandera Nacional y el Escudo bordado en hilo dorado, lo que refuerza su importancia como símbolo del Estado.
En cuanto a la vestimenta para el evento, no hay una regla específica, lo que deja al criterio del presidente o las autoridades locales elegir su atuendo, dependiendo de la personalidad del funcionario, las condiciones climáticas y las tradiciones locales.
Desarrollo de la Ceremonia del Grito
Aunque no hay una guía oficial que estipule el desarrollo minuto a minuto, la ceremonia del Grito de Independencia sigue ciertos pasos generales. Antes de salir al balcón o plataforma destinada, el presidente o autoridad recibe el Lábaro Patrio por parte de una escolta (generalmente militar o policial). Este momento es solemne y marca el inicio de la ceremonia.
En muchas localidades, la ceremonia se lleva a cabo el 15 de septiembre entre las 22 y 23 horas, aunque hay variaciones según la región.
BONUS ¿Sabías que en Guanajuato, en la sierra de Santa Rosa, se celebra el grito el 14 de octubre?
Las Fiestas Patrias de la sierra de Guanajuato tiene sus orígenes en 1864, cuando Maximiliano de Habsburgo hizo escala en este lugar durante su trayecto de Dolores a Guanajuato. Las y los habitantes de la sierra representaron para él la Toma de la Alhóndiga de Granaditas de 1810.
Fue hasta 1934 cuando Tomás Ulloa y Cruz Palacios, trabajadores mineros de la zona serrana, organizaron el primer desfile conmemorativo, con lo que se oficializó la representación de la batalla de Guanajuato que se realiza cada octubre desde entonces.
En el país, por costumbre, la ceremonia tiene lugar en el palacio municipal o en el caso de la capital del país, en el Palacio Nacional. Al salir al balcón, el presidente o la autoridad (presidente municipal, gobernador, delegado, etc.) tañe la campana que simboliza el llamado a la rebelión hecho por Hidalgo en 1810, y vocifera o da las arengas o “vivas” que celebran la independencia de México. Aquí, cada autoridad tiene libertad de modificar los nombres o conceptos incluidos en los vivas, adaptándolos a la realidad política y social actual.
Tradicionalmente, se sugiere que la autoridad primero toque la campana y luego emita los vivas, aunque esto puede variar. Este acto no solo es un momento de exaltación patriótica, sino también una oportunidad para reforzar los valores de unidad, respeto a la historia y compromiso con el futuro del país.
1.- Recepción de la Bandera Nacional
- La ceremonia generalmente comienza alrededor de las 22:30 horas, cuando el presidente o la máxima autoridad local (gobernadores, presidentes municipales) recibe la Bandera Nacional de manos de una escolta. La escolta puede estar conformada por miembros de las fuerzas armadas, la policía o incluso instituciones educativas.
2.- Salida al Balcón Presidencial
- Una vez que la autoridad ha recibido la bandera, se dirige al balcón principal (en el caso del Palacio Nacional, es el balcón del salón de honor) o al lugar designado en otras localidades. El uso del balcón es simbólico, ya que rememora cómo Hidalgo incitó a la población a levantarse contra el gobierno colonial.
- En las 32 entidades federativas de México, los gobernadores replican la ceremonia desde sus palacios de gobierno o edificios oficiales. Igualmente, en los municipios, los presidentes municipales dan el grito desde las plazas principales, aunque puede haber ligeras variaciones en cuanto al protocolo y la hora de la ceremonia, según las tradiciones locales.
3.- Tañido de la Campana
- Uno de los momentos más emblemáticos del Grito es el toque de la campana, que rememora el acto original de Miguel Hidalgo en la madrugada del 16 de septiembre de 1810, cuando convocó a los habitantes de Dolores al llamado de la insurgencia. En el Palacio Nacional, se utiliza una campana histórica que es la misma que tocó Hidalgo.
- La campana debería sonar tres veces. Recordemos que en las parroquias e iglesias, como la de Dolores, la costumbre para llamar a Misa o para dar anuncios ( señales es como se les conoce) es dar 3 campanadas, aunque estás, luego podrían repetirse. Así que siguiendo esa práctica, es lo ideal. En la historia de esta ceremonia, suele tañerse en más ocasiones, pero no hay un mínimo ni un máximo de veces permitidas.
- También podría medirse el número de campanadas. Hay una idea general que esta acción, la de tañer la campana, debería durar entre los 30 segundos hasta los 60 segundos.
- Una vez la autoridad procede a tañer a campana, sea la de Dolores o la que esté colocada para la ceremonia, debería hacerse (tañer) con la mano izquierda, mientras que con la derecha la autoridad sostiene la bandera (derecha, lugar de honor). Hay que cerciorarse que el mecanismo para esta acción sea simple y sencillo y no implique uso excesivo de fuerza. La realidad es que muchas veces el mandatario toca la campana con la mano derecha y con la izquierda sostiene la bandera.
4.- Arengas Patrióticas
- Después del toque de la campana, el presidente o la autoridad local pronuncia las arengas, que son vivas dirigidos a los héroes de la independencia y a la nación mexicana.
- Cabe mencionar que no hay lista ni referencia de VIVAS, cada alcalde, gobernador o presidente puede agregar o quitar nombres y conceptos, acompañados del «VIVA»
- Por lo general, lo que suele decirse es: «¡Mexicanos!, ¡Vivan los héroes que nos dieron patria!, ¡Viva Hidalgo!, ¡Viva Morelos!, ¡Viva Josefa Ortiz de Domínguez!, ¡Viva Allende!, ¡Vivan Aldama! ¡Viva Matamoros!, ¡Viva la independencia nacional!, ¡Viva México! ¡Viva México! ¡Viva México!»
5.- Ondear la bandera Nacional
- Una vez finalizadas las arengas, el titular de la administración de que se trate, ondeará la Bandera Nacional por un lapso no mayor a dos minutos.
6.- Himno Nacional Mexicano
- Una vez finalizadas las arengas, se entona el Himno Nacional Mexicano, lo cual es uno de los momentos más solemnes de la ceremonia. En el Zócalo de la Ciudad de México, el himno es interpretado por una banda militar, mientras que en otras localidades puede ser interpretado por coros, bandas o grabaciones.
- Concluida la ceremonia del “Grito de Independencia”, entregará la Bandera Nacional a la escolta militar, cuando proceda, para que sea retirada con los honores respectivos
7.- Espectáculo de Fuegos Artificiales
- Tras el Himno Nacional, la ceremonia suele culminar con un espectáculo de fuegos artificiales que ilumina el cielo en muchos municipios y la Ciudad de México. Este acto es una muestra de celebración popular y simboliza la alegría por la independencia del país. Sin embargo, hay que ser prudentes por los temas ambientales vigentes.
8.- Eventos Culturales y Festividades
- A menudo, la ceremonia del Grito es precedida y seguida por eventos culturales, conciertos y bailes populares. En el Zócalo de la Ciudad de México, se organizan presentaciones de artistas y grupos tradicionales.
El reto
Aunque no hay un ceremonial formalmente estipulado, se sugiere trabajar en la creación de un guion más formal que pueda servir de referencia para las autoridades locales, estatales y federales. Este guion podría incluir detalles más específicos sobre el manejo de los símbolos patrios y la secuencia de los actos, promoviendo una mayor uniformidad en todo el país.
Fuera de tintes e ideologías partidistas, hace falta en México una propuesta clara y concreta del #protocolo y #ceremonial a seguir para conmemorar el Grito de Dolores, y evitar los errores, las confusiones y al mismo tiempo, tener ceremonias en todo el país que, considerando los usos y costumbres, NO sean usadas para fines ideológicos o partidistas
Un acto solemne como lo es la ceremonia de independencia es clave y debería tener una guía clara para que no quede como una «ocurrencia» de cada Presidente, gobernador o alcalde, según sea su turno y momento.
¡Viva la Independencia Nacional!;
¡Vivan los héroes que nos dieron Patria!;
¡Vivan los héroes que nos dieron libertad!;
Viva Hidalgo!;
¡Viva Morelos!;
¡Viva Allende!;
¡Viva la Corregidora!;
¡Viva Aldama!
¡Viva Guerrero!
(¡Viva el estado libre de …!);
(¡Viva el municipio de …!);
¡Viva México!;
¡Viva México!;
¡Viva México!
En el caso de los Estados se agregará la alusión a la entidad correspondiente, de igual manera se hará en los municipios.
Además, se podría incluir un enfoque más inclusivo, destacando la diversidad cultural del país y reconociendo la contribución de diversos grupos sociales en la construcción de la nación. La ceremonia también podría reforzar el conocimiento histórico de los participantes, explicando brevemente el contexto del Grito de Dolores y su relevancia en la formación del México contemporáneo.
Curiosidades
El 16 de septiembre de 1812 fue la primera ocasión en que se dio el grito en nuestro país .
En 1813, José María Morelos y Pavón en su obra “Sentimientos de la Nación” lo inscribe, en el punto 23, para que el 16 de septiembre se dé la conmemoración de la independencia de México.
La celebración del Grito en 1854 tuvo un carácter más solemne de lo habitual, ya que por primera vez se entonó el Himno Nacional Mexicano que había ganado el concurso un año antes, convocado por Antonio López de Santa Anna.
El gobierno dispuso todo lo necesario para estrenar la obra el 15 de septiembre en el Teatro Santa Anna (después Gran Teatro Nacional). La interpretación estaría a cargo de una compañía de ópera italiana que se encontraba en México, dirigida por el maestro Giovanni Bottesini, con las voces de la soprano Claudia Florentini y del tenor Lorenzo Salvi.
Llegó la fecha esperada y el presidente Santa Anna no llegó al teatro, pero el evento no se suspendió y el público escuchó el Himno Nacional. Sin embargo, el estreno no se consideró un acto oficial y se repitió al día siguiente, ahora sí con la presencia del caudillo. En esta ocasión el tenor Salvi fue acompañado por Balbina Steffenone.