La ceremonia de la entrega de los premios de la academia, los Oscar, es una de las mas vistas en todo el mundo, tanto así, que todo lo que en ella sucede, previo, durante y posterior marca la conversación y en algunos casos, hasta las tendencias en moda que veremos después de dicho evento.
Esta ceremonia es el mejor ejemplo de que todo esta previamente calculado y medido, la alfombra roja, que mide 100 metros, se coloca días previos y se tapa para que no se ensucie hasta el día del evento.
La ceremonia se precia de tener un guion que marca cada momento, pero sigue siendo falible en un aspecto: los discursos de los ganadores, tanto así que han habido intentos por limitar la extensión de los mismos ( no olvidemos que tiene una audiencia de millones de televidentes y usuarios de internet, así que unas palabras mas o menos que se digan, causan impacto) ya sea entregando “premios” a los discursos mas cortos o bien, como sucedió ayer, subiendo el volumen de la música de fondo tras 45 segundos.
Vale la pena mencionar que hay un ensayo donde el “publico” son los trabajadores que días atrás estuvieron trabajando en el montaje del escenario, donde participan los actores designados para dar las categorías para cronometrar los tiempos, es decir, todo debe ir en su momento y lugar.
Los lugares ya tienen la fotografía de quien ira ahí así los acomodares se van aprendiendo el acomodo de cada uno de ellos.
Y todo, todo se ensaya, hasta la “alfombra roja”.
Todo un evento para analizar.
